1. Fantasma
Pobres
estos
ojos:
en los tuyos
no han encontrado
luz alguna.
Pobres
estos
brazos:
sólo han presagiado
el aire sutil
de tus pulmones.
Pobres
estas
manos:
han esculpido de memoria
tu fértil efigie.
Ninguna sonrisa
ha logrado fracturarla.
Pobre
este
corazón:
sigue palpitando
por
causa tuya,
sin que obtenga respuesta.
Pobre de mí:
Espero lo imposible:
luz de tus ojos,
aire que respiro,
inclaudicables labios,
claro silencio:
porque un día moriré,
arrastrando
un tibio,
pero oscuro fantasma.
2. Temor
Temo que nuestra piel se desprenda:
cayendo en el abismo
de la soledad.
Temo el abismo que llega con el tiempo:
que tu sombra no me
cobije.
Temo la sombra que oculta la caricia:
incluso en brazos de
la muerte.
Temo de mi muerte:
tu previo exilio,
tu lejanía incólume,
tu certera ausencia.
2. Augurio
Nuestra cocina está rota.
Disgregada, la
estampida de los faunos.
Roto,
también, el Oráculo:
¿Dónde sembraremos la semilla del
retorno?
¿Dónde fingiré tu
presencia?
¿Dónde me desaceré, grano a grano.
como castillo de sal y arena,
antes que el viento me arrastre
hacia el este?
Deja que el augurio prosiga su camino.
Detrás de ti:
Seré marejada de
hormigas fugitivas.
Seré
premura de naviero entre el Tigris y el Éufrates,
Seré, de sándalo, sagrado incienso.
Seré,
de retoños y fécula, simple colmena.